LA CHICA (Historia corta)


LA CHICA

En la mañana cuando una chica muy hermosa a bordo el autobús, ella debe haber estado en sus 20 años más o menos, su largo y oscuro cabello estaba escondido detrás de sus orejas y yo me encontraba a pocos lugares de donde ella estaba sentada.

Tuve la suerte de poder mirarla con claridad quedé maravillado con su belleza y como no quería olvidar su imagen decidí sacarle algunas fotografías solo para refrescar mi memoria más tarde.

Entonces esperé con mi teléfono hasta que ella se volteó un poco hacia mí e intenté tomar tantas fotos como me fuera posible y desde varios ángulos.
Obviamente todo esto evitando que ella pudiera darse cuenta, pues hubiera sido una situación tremendamente vergonzosa y supongo que también ilegal.

Sin embargo sabía que ninguna cantidad de fotos podría reemplazar la belleza de verla en persona, ella bajó del autobús un par de paradas antes que yo y la vi alejarse entre las calles no podía dejar de pensar en ella así que saqué mi teléfono y comencé a revisar las fotos que le había tomado.

Como me gustaría saber su nombre pensaba en la primera foto, mostraba su cabello largo y sedoso que cubría parcialmente su rostro, supuse que había sobreexpuesto un poco la segunda foto porque su cabello de alguna manera extraña parecía ser de color blanco.

En la tercera foto sin embargo note que sus ojos estaban inclinados hacia arriba pero eso no era todo, estaban inyectados en sangre se veían un poco rojos, estaba perplejo pase directamente a la siguiente foto y dejé caer mi teléfono al suelo.

El rostro de esa hermosa chica se había vuelto completamente hacia mí y estaba mirándome con unos ojos macabros, sus ojos ya no estaban inyectados en sangre sino que la sangre parecía brotar desde ello.

En el autobús ella nunca se había volteado completamente hacia mí entonces cómo podía esta foto mostrarla así, estaba pensando en ello cuando mi teléfono comenzó a sonar lo levanté del suelo con mis manos temblorosas y abrí el mensaje que acababa de recibir.

Un número desconocido me había enviado una foto era una foto de mí en ese mismo momento dentro de mi habitación inclinándome para levantar el teléfono fue entonces cuando escuché una áspera y profunda voz diciéndome yo también puedo tomarte fotos.

No hay comentarios